Familiares de capturados de forma arbitraria en la finca La Pelota – Fotografía: Cortesía
El terror se apoderó de la familia de la finca La Pelota, ubicada entre Masaya y Tipitapa, luego que Policías Orteguistas (PO), los hicieron cavar huecos y les amenazaban con ejecutarlos allí mismo.
Las amenazas no fueron solo verbales sino que en presencia de sus parientes, sobre todo mujeres, varios hombres de la misma familia fueron golpeados por horas, antes de ser sacados de forma arbitraria del lugar.
Santos José Sánchez fue uno de los que fue más golpeado, casi no podía caminar, cuando se lo llevaron, dijeron sus familiares.
A Sánchez la PO lo acusa de haber participado en las diversas manifestaciones de los autoconvocados en Masaya, le confiaron sus familiares al asesor legal de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), Pablo Cuevas.
En la persecución contra Sánchez la PO ha secuestrado a sus dos exparejas, una de ellas permaneció por horas retenida junto a su bebé e igual su padre, para presionarlo que este se entregara.
Lo más grave, según lo denunciado por la madre de Sánchez , Petrona Rodriguez, fue que a una de las excónyuges, Heydi Raquel Hurtado González, en enero pasado de su casa la secuestraron policías y hombres vestidos de civil cuando esta regresaba de vender en la calle. Según Cuevas, esto fue como una forma para obligar a Sánchez a entregarse.
Sin embargo, pese a que a Sánchez lo capturaron el pasado lunes, la familia desconoce aún el paradero de Hurtado, denunció Cuevas, quien dijo, ya no se distingue quien es delincuente y quien es autoridad.
Cuevas condenó este hecho, pues «son aberraciones que trastocan y vulneran y llevan a límites insospechados el estado de derecho. Pareciera que estamos en un estado de facto».
Otras familiares de capturados de forma arbitraria en el lugar, alegaron que desconocen por qué se los llevaron si ellos sin militantes orteguistas.