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Alta Comisionada de DD.HH de ONU preocupada por condenas impuestas a presos políticos

Preocupa a Alta Comisionada de DDHH represalia contra líderes de la disidencia en Nicaragua – Fotografía: Antonio Ramírez

De continuar las detenciones y condenas en contra de la disidencia en Nicaragua los esfuerzos para iniciar un diálogo que resuelva la crisis política y social del país se verá inevitablemente socavado, señala ¡ la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos Michelle Bachelet.

A través de una nota de prensa expresa preocupación por la independencia del Poder Judicial pues varios tribunales han dictado sentencias de culpabilidad e impuesto penas extremadamente severas en contra de varios líderes de la oposición y comunitarios, algunos de los cuales han «cooperado» con las Naciones Unidas y han contribuido a dar visibilidad a los abusos de los derechos humanos cometidos en Nicaragua.

Otros que han expresado opiniones disidentes , incluidos estudiantes, periodistas y un juez de la Corte Suprema de Justicia han huido del país, dice la nota.

“Estoy profundamente preocupada por la aparente falta del debido proceso y el aumento de la criminalización de la disidencia en Nicaragua”, manifestó Bachelet quien expresó que “el arresto y encarcelamiento de líderes de la oposición posiblemente en algunos casos como represalia por cooperar con la ONU, dificulta claramente la creación de entorno propicio para mantener un diálogo genuino e inclusivo que el gobierno dice querer”.

Destaca también los casos de los presos políticos Jonathan López , sentenciado a cinco años tres meses y de los líderes campesinos Medardo Mairena y Pedro Mena, sentenciados a las insólitas penas de 216 años y 210 años de prisión, respectivamente. Así como los casos de los exmilitares Tomás Maldonado y Carlos Brenes, para quienes la Fiscalía ha solicitado más de 30 años de cárcel.

«Se necesita una revisión independiente de las condenas y las sentencias impuestas a los líderes de la oposición y activistas que participaron en las protestas, para garantizar que las personas que cooperan con la ONU y otras organizaciones de derechos humanos no sufran represalias», manifestó la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU.


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