Monseñor Rolando Álvarez. Fotografía tomada de Diócesis Media.
El obispo de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, monseñor Rolando Álvarez, llamó a detener la espiral de violencia en el país y a que cese el nuevo éxodo de nacionales que desintegra los hogares nicaragüenses y que “desangra a Nicaragua”,.
En la homilía de la Misa de este 3 de octubre, celebrada en la catedral San Pedro, en Matagalpa, Álvarez resaltó que miles de familias han dejado el país por falta de empleo y por la situación sociopolítica enfrentada, evidenciada en los últimos meses cuando han aumentado las “caravanas completas de hermanos nicaragüenses que no encontraron en nuestro país lo que necesitaban para vivir dignamente y buscan lo que no encontraron aquí”, pese a que ponen en riesgo sus vidas.
“Otra vez los nicaragüenses sufrimos la pérdida de hombres y mujeres inteligentes, audaces, creativos, emprendedoras, trabajadores, constructores del campo y la ciudad, jóvenes y hasta niños que representan el presente y el futuro de nuestra patria”, refirió el religioso.
Tras sostener: “Nos duele en el alma tanto dolor, cómo no pensar que Nicaragua vive otro éxodo como un pueblo que busca otro mejor futuro porque se les han cerrado las puertas en su propia patria».
Por lo que el religioso recordó que “Nicaragua es de todos, y todos tenemos derecho a vivir en paz y en libertad, en justicia y santidad, todos como hermanos, sin exclusiones, sin nicaragüenses que sean tratados como descartables, queremos vivir sin periferias humanas, que se detenga la espiral de violencia contra la familia”.