Diputados del oficialismo proponen iniciativa de ley de agentes extranjeros. Fotografía: Tomada de la Asamblea Nacional.
Como parte de la persecución a la que el régimen ha sometido a la población desde hace 29 meses, le ha sumado una iniciativa de ley en que intenta definir como elementos extranjeros a los nicaragüenses que reciben de alguna manera cooperación de organizaciones internacionales, de la cual no escapan las ONG y los medios de comunicación independiente alternativos que han surgido en medio de la crisis sociopolítica que enfrenta el país.
La iniciativa de Ley de regulación de agentes extranjeros, que promueven diputados del oficialismo en la Asamblea Nacional, entre otras cosas señala que la misma tiene como objeto establecer el marco jurídico de regulación a las personas naturales o jurídica que reciben financiamiento extranjero para realizar actividades que deriven en injerencia en los asuntos internos de Nicaragua, poniendo en riesgo la seguridad del Estado.
Igualmente refiere que las organizaciones, asociaciones o personas naturales o jurídicas nicaragüenses o de otras nacionalidades que dentro de Nicaragua perciban fondos, bienes o cualquier objeto de valor provenientes directa o indirectamente de gobiernos, agencias, fundaciones, sociedades o asociaciones extranjeras del tipo o naturaleza que sean están obligadas a inscribirse en el Registro de Agentes Extranjeros establecido en la misma que será el Ministerio de Gobernación, indica la iniciativa de ley.
La misma incluye no solo a organizaciones, asociaciones o personas naturales y jurídicas que reciben fondos de organizaciones extranjeras que deberán registrarse en el Ministerio de Gobernación, sino también “las personas que dentro de Nicaragua actúen como consejeros, relacionistas públicos, agentes de publicidad, empleados de servicio de información o consultores políticos para o en interés de gobiernos, fundaciones, empresas o asociaciones extranjeras”.
Iniciativa de ley persecutoria y excluyente
El presidente del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, Gonzalo Carrión, calificó de “persecutoria, discriminatoria y excluyente” la iniciativa de Ley, pues llega al extremo de tildar de extranjeros a los nicaragüenses, que “en un mundo conectado hay una cooperación de años”.
“Es como terminar de aplastar las expresiones de organización ciudadana”, dijo Carrión quien señaló que el título parece es para regular a extranjeros, pero llega al extremo de encasillar con este título a nicaragüenses. Esta iniciativa puede recurrirse de amparo y por inconstitucionalidad.
En todo caso, apuntó Carrión, a los primeros que les cae la iniciativa es a quienes proponen esta iniciativa que “tienen las manos manchadas”, con la cooperación del régimen venezolano por millonadas de dólares y no se inscriben las excepciones indicadas.
Para Alfonso Malespín Jirón, experto en comunicación esta iniciativa de ley respaldada con la firma de todos los diputados de la bancada sandinista, es más que suficiente para aprobar una pieza que va a regular desde el momento en que se aprueba a todas las personas y organizaciones que reciban financiación del exterior y van a quedar tutelados por el Ministerio de Gobernación.
La intención según la presentación del anteproyecto de ley es regular las actividades que deriven en la injerencia de gobiernos u organizaciones extranjeras en los asuntos internos de Nicaragua y que pone en riesgo la seguridad del Estado.
Estrategia del régimen para fortalecerse de cara a elecciones
Según Malespín, hay dos conceptos claves en esta propuesta de ley, la injerencia de gobiernos y organizaciones y la seguridad del Estado, de tal manera que los potenciales enemigos son bastantes y lo que van a ser es sujetarlos y eliminarlos en la medida de lo posible para que la fuerza en el gobierno tenga mejores posibilidades de ganar el próximo proceso electoral.
La intención es clara, recuerden que vamos a un año electoral y en un proceso electoral hay financiamiento proveniente de distintas áreas y lo que el gobierno de Nicaragua pretende es controlar el financiamiento electoral que venga a las fuerzas políticas que vayan a participar y que son opositoras; pero sobre todo a los medios de comunicación, señaló Malespín.
Carrión dijo que los nicaragüenses tienen un listado de derechos y garantías constitucionales que son derechos humanos, como ejercer cuestionamientos públicos y de participación en la política del país. Y con ese proyecto de ley le corta esos derechos “y sus relaciones de vida política, de vida pública”, dijo Carrión, quien indicó que con esto el régimen busca cortar además toda forma de fuente expresada en solidaridad.
“Esa ley va con dedicatoria (…) que ninguno de los que estén pretendiendo ejercer política pública y la están ejerciendo con todo el derecho, estarán inhibidos en virtud de esta ley, es decir se están anticipando para inhibir candidaturas (…) eso es inconstitucional, porque es la Constitución que establece quienes pueden ser candidatos, y esa ley que es ordinaria invade un ámbito que es reservado a la Constitución, y solo puede ser mediante reformas constitucionales”, señaló el defensor de derechos humanos.
Iniciativa gravísima para la libertad de prensa
Hay una diversidad de organizaciones e individuos que reciben fondos del exterior y entre ellos están medios de comunicación independientes, para nadie es un secreto que el mercado de anunciantes en Nicaragua y de organizaciones que auspician medios de comunicación están altamente deprimidos, por otro lado, el mercado de anunciantes privados también está altamente deprimido después de casi diez trimestres consecutivos del desplome de la actividad económica en el país.
De acuerdo a Malespín, los únicos medios que están blindados frente a este desplome de la economía nacional son los medios financiados con el Consejo de Comunicación y Ciudadanía, los Ministerios y los entes del Estado por orientaciones superiores.
“El gobierno sabe muy bien que aquí una gran cantidad de medios recibe auspicio del extranjero para poder continuar superviviendo. Si ese financiamiento se acaba, de repente Nicaragua en vez tener 300 medios de comunicación se puede quedar con cincuenta en cuestión de semanas o meses, porque no van a hacer capaces de sostener su actividad informativa”, destaca Malespín.
Esto va implicar además que todos los medios de comunicación que reciben auspicio van a tener que ir a registrarse al Ministerio de Gobernación y todo trabajador de esos medios de comunicación tendrán que hacer lo mismo, “de tal manera que habrá un control minucioso de cada centavo que cada periodista se gana para poder llevar la comida a su casa mes a mes”, advirtió Malespín.
Y esto también aplica para los organismos de derechos humanos y para las organizaciones políticas.
Hay un segundo elemento que está contenido en el Artículo 12 de la Constitución, que se titula Agentes Extranjeros, es artículo manada que todas las persona y organizaciones que reciban algún tipo de fondos provenientes del exterior se abstengan de participar, sopena de sanciones legales, en cuestiones, actividades o temas de política interna.
“Que es lo que hace un medio de comunicación difundir noticias, las noticias se refieren a asuntos internos del país y también internacionales, pero a partir de ahora todo medio de comunicación que reciba auspicio del exterior y todo periodista que reciba salario de ese medio de comunicación no van a poder informar, ni opinar sobre asuntos de las índoles que el gobierno denomina política interna”, explica Malespín.
Esfuerzo colaborativo de Obrera de la Tecla y República 18.