Las pruebas de COVID-19 empezaron a efectuarse la mañana de este viernes entre los migrantes nicaragüenses varados en Peñas Blancas, que están por cumplir dos semanas en ese lugar ante el impedimento del régimen de permitirles el ingreso, sin el comprobante de la negativa del coronovarus.
La Fundación Arias para la Paz y el Progreso Humano informó a través de un comunicado que las mismas empezaron a realizarse entre los nacionales, .”tras obtenerse los fondos suficientes para financiarlas casi en su totalidad” .
En el mismo indica, que los fondos provienen de organizaciones humanitarias e individuos que respondieron al llamado de esa fundación y del Centro de Derechos Laborales para lo cual han contado con la colaboración de la Clínica Bíblica, por lo que han iniciado el proceso bajo la coordinación del gobierno de Costa Rica.
“Hoy más que nunca es cuando sale a flote la solidaridad de las y los costarricenses. La crisis humanitaria en la frontera norte de cientos de hermanos nicaragüenses movilizó a individuos y organizaciones privadas a poner en práctica esta regla de oro de todas las religiones: El amor al prójimo”, comentó Lina Barrantes, directora ejecutiva.
Barrantes estima que la crisis en la frontera con Nicaragua “tiene solo un culpable y es la dictadura Ortega Murillo, quienes irrespetan los más sagrados valores universales de respeto a la dignidad humana”.