La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares de protección a favor de José Bernard Pallais Arana, tras considerar que se encuentra en una situación de gravedad y urgencia, de riesgo de daño irreparable a sus derechos. Pallais padece enfermedades crónicas graves y permanece privado de libertad desde el 9 de junio de 2021, sin que se conozca su paradero ni condiciones de detención .
La CIDH solicitó al Estado de Nicaragua que adopte las medidas necesarias para proteger los derechos a la vida, integridad personal y salud de Pallais Arana, asegure que sus condiciones de detención sean compatibles con los estándares internacionales aplicables en la materia y sea evaluada inmediatamente la posibilidad de otorgarle medidas alternativas a la privación de la libertad, de conformidad con la normativa interna y a la luz de los estándares interamericanos aplicables.
Para esto, señala debe tomarse en cuenta la situación de riesgo a la vida, integridad personal y salud como resultado de las circunstancias que rodean su privación de la libertad actuales. La CIDH le pide al Estado de Nicaragua informe sobre las acciones adelantadas a fin de investigar los presuntos hechos que dieron lugar a la adopción de la presente resolución y así evitar su repetición.
A través de un comunicado de prensa la Comisión confirmó que recibió información del Estado de Nicaragua en relación a la protección y garantía de los derechos humanos de todas las personas en la que más allá de manifestar “la inexistencia de una situación de gravedad”, no informó sobre dónde estaría detenido Pallais.
Tampoco presentó información a la CIDH sobre las condiciones actuales de detención y salud de Pallais, “de forma tal que no resultó posible analizar si el alegato de la parte solicitante sobre la existencia de un grave riesgo en su contra ha quedado desvirtuado”.
“La Comisión considera que la información presentada demuestra prima facie que José Pallais Arana se encuentra en una situación de gravedad y urgencia, puesto que sus derechos a la vida e integridad personal están en riesgo de daño irreparable”, señala la CIDH.