La Organización Panamericana de la Salud (OPS), insistió este martes en la importancia de la protección y el cese de hostigamiento a trabajadores de la salud en Nicaragua.
«Y en cuanto a los trabajadores sanitarios hemos sido claros en decir que hay que proteger esos trabajadores en Nicaragua”, expresó el director de emergencias en salud de la OPS, doctor Ciro Ugarte.
Tras referir: “En todos los países nuestros trabajadores y la comunidad médica ponen sus vidas en riesgo y si no cuentan con los equipos de protección personal necesarios y si a ellos no se les protege de hostigamiento, de despido por expresar preocupación por la COVID-19 estamos poniendo a los trabajadores de salud en una situación más difícil; eso lo hemos dicho ya una vez y queremos reiterar ese llamado no solo para Nicaragua sino para los otros países también”.
El Observatorio Ciudadano en su último reporte que comprende la semana del 2 al 8 de julio registró información recibida de 17 departamentos y regiones autónomas de 719 trabajadores de la salud con síntomas asociados o presuntivos a COVID-19, y 94 muertes de personal de salud por sospechas del virus.
MINSA incumple con Reglamento Sanitario Internacional
Por otra parte, Ugarte insistió en que el Ministerio de Salud (MINSA) del Régimen sigue sin cumplir con lo establecido en el Reglamento Sanitario Internacional al no reportar a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la información detallada sobre la pandemia de COVID-19.
Ugarte reiteró este martes que los funcionarios del régimen reportan información semanal, pero lo mismo que informan a lo interno, o sea el número de casos, el número de fallecidos y el número de recuperados.Pero no de forma detallada «como lo requiere el reglamento sanitario internacional”. Y según Ugarte, esos datos no pueden referirse al impacto de la pandemia en el país.
El funcionario de la OPS expresó que la información con que cuenta el régimen sobre la situación actual en Nicaragua es importante no solo para los países vecinos y la comunidad internacional sino para la población para que pueda adoptar las medidas preventivas.
“Tenemos que ver lo que es el número de casos, cuál es la situación frente a los servicios de salud, el número de muertos y una vez que se tenga esa información vamos a poder determinar lo que ha sido el impacto de este enfoque”, expresó Ugarte.
Y aunque dijo Ugarte “la OPS se alegra saber” que el régimen ha anunciado la reducción de celebraciones públicas; “esperamos que puedan llevar a cabo esas medidas para reducir la transmisión y así salvar vidas en Nicaragua, y como esta información no se comparte de forma debida, puede parecer que la situación no es tan grave como en otros países”.
Sobre la celebración de fiestas y aglomeraciones en general el doctor Marcos Espinal, director del departamento de enfermedades transmisibles, reiteró que hay que evitar fiestas y aglomeraciones que no sean estrictamente necesarias. Y en los casos de reuniones pequeñas recomendó que lo hagan con distanciamiento y el uso de mascarillas. “Las aglomeraciones ayudan a diseminar el virus”, insistió Espinal.