Mientras la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), advierte que la crisis de derechos humanos en Nicaragua podría agravarse con el COVID-19, mientras el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, expresó preocupación sobre el manejo de la pandemia.
A través de su cuenta de Twitter, OACNUDH expresa que mantiene el monitoreo de la crisis de derechos humanos en Nicaragua pues «preocupa la ausencia de medidas de distanciamiento físico, como lo indicado por la OPS/OMS y la falta de acceso a información sobre pruebas y controles» .
Una preocupación similar externó Almagro este miércoles, cuando dijo, que Nicaragua ha sido el caso extremo pues no hay transparencia de los datos, falta de controles, de test y no ha habido responsabilidad en las actuaciones al persistir las reuniones masivas.
La situación de los presos políticos y de los privados de libertad en general por el hacinamiento en las cárceles del país, también fue motivo de preocupación de Almagro.
En su alocución del medio día de este miércoles, Rosario Murillo, que hace de vocera del régimen anunció que 1,700 presos fueron excarcelados bajo el beneficio de convivencia familiar.
En tanto OACNUDH recordó que la Alta Comisionada, Michelle Bachelet ha señalado que los derechos humanos «deben ser centrales en la respuesta al COVID-19. Ser claros y transparentes es clave para empoderar y alentar a las personas a participar en las medidas diseñadas para la protección de su salud».