El 8 de marzo Día Internacional de la Mujer en Nicaragua se conmemora en medio de la represión estatal, que impide a la población salir a las calles a expresarse y criminaliza voces disidentes entre ellas las mujeres.
Según Iniciativa de Defensoras de Nicaragua, 102 defensoras de derechos humanos, feministas, líderes estudiantiles y comumitarias han sido detenidas arbitrariamente por policías y paramilitares.
A la fecha 63 mujeres continúan en prisión, ocho de ellas en huelga de hambre, por lo que la Iniciativa de Defensoras ha llamado este 8 de marzo a la acción en solidaridad con las presas políticas. Y anuncia que a partir de este viernes inicia una campaña global permanente por su liberación.
«Esta criminalización responde a motivos ideológicos y de consciencia, en el marco de la campaña de represión contra organizaciones de derechos humanos, medios de comunicación y movimientos populares y sociales críticos al régimen Ortega Murillo», refiere la Iniciativa de Defensoras.
La organización Católicas por el Derecho a Decidir capítulo de Nicaragua exigió la libertad para las presas políticas, así como no más violencia sexual contra manifestantes y cesen las detenciones arbitrarias e ilegales.
Por su parte el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), reafirmó su compromiso de seguir denunciando «las atrocidades que viven y sufren las mujeres en el régimen Ortega Murillo»..
A la fecha en Nicaragua las mujeres son «víctimas por parte del Estado con encarcelamientos, agresiones sexuales, represión, asedio, amenazas de muerte, obligando a miles a exiliarse para proteger su vida, por el solo hecho de alzar su voz y demandar justicia violentando sus derechos y los de sus familias», expresa el CENIDH.