Ante al asedio permanente por parte de fuerzas policiales del régimen, el maratonista Alex Vanegas, optó por el exilio.
Byron Vanegas, hijo del maratonista confirmó este miércoles «ya hablé con él hace unos minutos y está todo bien».
Vanegas refirió que su progenitor no soportó el asedio en las esquinas, el hecho que cada hora pasaban patrullas, «se bajaban, miraban y se iban».
«Él decía ya no. Literalmente él dijo Nicaragua entera es una cárcel, ellos dicen que me soltaron, que tengo casa por cárcel pero Nicaragua entera es una cárcel», recordó el.vástago del maratonista.
Según Vanegas, su padre urgía de la revisión de un médico, pues producto de una golpiza recibida tenía inflamado los testículos y en el país no podía salir ni a recibir atención médica.
El maratonista es uno de los más de cien presos políticos a quienes el régimen les cambió las medidas carcelarias.
Vanegas permanecía secuestrado de forma ilegal, desde el 2 de noviembre del 2018 cuando la Policía Orteguista (PO), lo detuvo de forma ilegal y arbitraria en un cementerio local.
El 27 de febrero pasado la abogada de Vanegas, Maria Oviedo, afirmó desde la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), que Vanegas fue liberado porque permanecía secuestrado, pues no había un proceso abierto en su contra que justificara su permanencia en una cárcel.
Y la falta penal por la cual fue acusado Vanegas había prescrito y la judicial del caso no se pronunció.