Con rezos y demostraciones de fe hacia la consagrada imagen de la Sangre de Cristo, devotos y promesantes católicos se congregaron la tarde del Viernes de Dolores, en la Catedral Metropolitana de Managua para conmemorar su tradicional «bajada». Esta vez en sustitución de la consagrada imagen fue sacada de su capilla, una estampa de la misma.
La actividad religiosa fue presidida por el Arzobispo de Managua, cardenal Leopoldo Brenes. De esa manera dan inicios las actividades religiosas como parte de la Semana Santa, en la Arquidiócesis de Managua.