Alrededor de 20 nicaragüenses están varados en la frontera El Amatllo entre Honduras y El Salvador, donde según denuncia recibida por Defensores del Pueblo no les han permitido el pase.
El abogado Julio Montenegro, de Defensores del Pueblo, aseguró que la denuncia la recibió a través de un familiar de una de las personas que están en el lugar y quienes con urgencia piden auxilio.
Para constatar la situación en que permanecen una de las personas grabó un video, en el que asegura es originario del municipio de Mateare, explica las condiciones en que permanecen y pide apoyo del gobierno para retornar a casa.
Estas personas aseguran que desde hace varios días permanecen en el lugar sin alimentos y sin poder efectuar el aseo personal, pese a la pandemia del COVID-19.
Hasta ahora estas personas han podido obtener ayuda de vecinos del sector que tampoco cuentan con muchos recursos pues es una zona rural donde están inmovilizados.
Montenegro recordó la responsabilidad del Estado de Nicaragua de realizar gestiones antes las autoridades correspondientes para facilitar el retorno de sus ciudadanos a su país.
A mediados de la semana pasada otras 56 personas que viajaban procedente de El Salvador se vieron obligados a ingresar a su país por puntos ciegos, ante el impedimento del régimen de permitirles el acceso en la frontera de Guasaule.
“A veces miramos que la tendencia es a poner muros para que la gente no pase y esa no es la solución al problema”, dijo Montenegro, quien sugirió que en este momento el régimen debería establecer un equipo médico en las fronteras para así facilitar el ingreso de nacionales que en medio de dificultades retornan al país.
En la isla Gran Caimán también otros 180 nacionales esperan su repatriación, sin que sus demandas hayan sido escuchadas hasta ahora.