La iniciativa de reforma a la Ley Electoral introducida este lunes por los diputados oficialistas en la Asamblea Nacional no recoge las recomendaciones contempladas tanto en la resolución aprobada en la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) en octubre del 2020, como por las misiones de observación electoral de la OEA, Unión Europea y de otros organismos especializados y pretende imponer un proceso electoral centrado en las inhibiciones a los candidatos opositores, sostiene la Coalición Nacional.
Igualmente, según la Coalición, el proyecto de Ley, no está en concordancia con las reformas contempladas en el documento del Grupo Promotor de Reformas Electorales (GPRE), apoyadas por la inmensa mayoría de las fuerzas sociales y políticas y enfatiza en la exclusión e inhibición,.
“Es improcedente pretender imponer un proceso electoral centrado en las inhibiciones a los candidatos opositores, permitiendo al dictador escoger a sus oponentes, limitando su capacidad de financiarse, organizarse y movilizarse, fortaleciendo el estado policial que han construido sobre la base de la suspensión de facto de los derechos constitucionales de los nicaragüenses”, señaló la Coalición Nacional en una nota de prensa.
La iniciativa no garantiza la observación electoral nacional e internacional y más bien suprime las pocas referencias a la misma, incluye nuevas causales de cancelación de personalidades jurídicas y de destitución de diputados electos y confirma la voluntad dictatorial de continuar imponiendo a cualquier costo un modelo totalitario e ilegítimo, que solo asegura más deterioro económico e inestabilidad social y política, resume la Coalición Nacional.
En su nota la Coalición advierte que de aprobarse estas reformas “constituiría un retroceso más en la institucionalidad democrática del país, frustrando la posibilidad de celebrar elecciones libres, transparentes, competitivas, observadas y justas, necesarias para solucionar la compleja crisis que afecta el país”.
“La dictadura al abrir este proceso de reforma, negándose a establecer un dialogo previo con la oposición muestra una vez más su falta de voluntad de propiciar una salida democrática y pacífica, mediante las elecciones libres que demandamos los nicaragüenses y exige la comunidad internacional”, expone la Coalición Nacional, que insiste en que “todavía es factible e ineludible lograr la unidad para detener este proyecto de Ley que pretende cerrar toda posibilidad de cambio, anulando la expresión soberana de los ciudadanos mediante el ejercicio del voto”.
José Antonio Peraza, de la Unidad Nacional rechazó el proyecto de ley, que dijo no solo ignora las recomendaciones de la OEA y de la comunidad internacional sino que se concentra en los elementos represivos.
Tamara Dávila por su parte la calificó como una burla a la población que desea elecciones libres, inhibe cualquier candidatura de personas vinculadas a la lucha de abril.