Ante las informaciones de que el joven Oliver Montenegro estaría padeciendo síntomas de la pandemia de COVID-19, sin atención médica y sin acceso a medicinas en una celda de la Delegación de Policía de Jinotega, la abogada Yonarqui Martínez introdujo este miércoles un escrito ante el juez de la causa para que sea valorado de forma adecuada.
Martínez conoció la noche del martes por familiares del joven detenido que este sufre de fiebre alta, tos y dolor de cuerpo sin que reciba la atención adecuada.
“El temor de la familia es que induzcan a su muerte por no atenderle a tiempo”, denunció desde las redes sociales la abogada Martínez, quien exigió atención médica urgente.
Martínez recordó, que las autoridades están en la obligación de prestar auxilio al detenido cuando están en una situación similar a la que enfrenta Montenegro, sin embargo, no lo han hecho.
Montenegro, de 21 años, fue secuestrado el pasado 21 de junio, en la vía pública y en horas de la noche en Wiwilí, Jinotega, su familia ha sido víctima de represión por apoyar las protestas sociales de 2018. Cuatro de sus miembros han sido asesinados.
Después de su secuestro Montenegro apareció en las celdas de la Policía de Jinotega y acusado por la Fiscalía de homicidio frustrado, hecho que sus familiares han denunciado ha sido fabricado en su contra.