Tras 18 días de ausencia, Daniel Ortega salió a hablar en cadena nacional para responsabilizar a Costa Rica del cierre de fronteras e instar al gobierno de ese país a ponerse de acuerdo. También ofreció cifras de muertes por neumonía que ya sobrepasan las muertes ocurridos en los primeros cinco meses del año 2019.
Entre enero a mayo del año pasado en Nicaragua hubo 222 muertes por neumonía, a la fecha ya registra 309 muertes por neumonía, que Ortega llegó a decir que así terminan las gripes mal curadas, o la H1N1, o influenza.
El Ministerio de Salud (MINSA) tiene reportado en su boletín epidemiológico hasta la semana 18, que hubo 27,682 casos por neumonía, que representó una disminución del 20.7 por ciento de casos reportados en relación a igual período en 2019 que fue de 34,906 casos.
Por tanto cómo se explica que haya más muertes en lo que va del año cuando hubo menos casos de enfermos por neumonía. El MINSA lleva dos semanas sin reportar el boletín epidemiológico.
A esto se agrega, que en muchos de los casos de personas fallecidas en los últimos días el acta de defunción ha señalado neumonía atípica y las autoridades han orientado a sus familiares sepultarles de inmediato. Pero Ortega se limitó a referir que “en estas (cifras) van algunas que tienen que ver con esta pandemia”.
Esto para entender, según dijo, “como hemos logrado contrarrestar la pandemia, aunque lógicamente por otro lado tenemos también lo que es el ciclo normal de fallecimientos por neumonía, donde no todos estos tiene que ver con el coronavirus”.
Y según dijo, en la 73 Asamblea Mundial de la Salud la presentación de Nicaragua partió «de nuestra realidad, el orden económico y social con que hemos venido enfrentando esta epidemia, cuidando, defendiendo la vida de los nicaragüenses, aplicando las normas básicas que están establecidas en los protocolos nacionales e internacionales. Y siguiendo la experiencia de otros países».
Más preocupado por cierre de fronteras
Ortega mencionó que las autoridades de Costa Rica empezaron a establecer medidas de manera unilateral que dieron como resultado el cierre de las frontera.
“Es Costa Rica el que ha cerrado las fronteras”, con las medidas que empezó a establecer, insistió Ortega, quien dijo, que más de mil furgones de los diferentes países centroamericanos están retenidos en las frontera sur.
«Lo importante es que por combatir la pandemia no se puede crear una crisis y una pandemia que tendría un impacto humanitario», afirmó Ortega quien no se refirió al hecho de que transportistas nicaragüenses dieron positivo con COVID-19, ni a los once transportistas extranjeros rechazados por su gobierno.
El Diario La Nación de Costa Rica, informó que fue el gobierno de Nicaragua que ordenó el cierre del tránsito por el puesto fronterizo de Peñas Blancas en protesta por las medidas tomadas por Costa Rica en el trasiego de productos en el marco de los controles contra el nuevo coronavirus.
Según ese diario, la medida fue confirmada por el ministro de Hacienda de Costa Rica, Rodrigo Chaves. Luego de comunicarse con las autoridades de Aduana del puesto fronterizo.
Chaves explicó, que la decisión del régimen fue conocida este 18 de mayo en la reunión urgente del Consejo de ministros de la Integración Centroamericana (Comieco) para analizar la crisis en los puestos fronterizos.
El vienes pasado Costa Rica emitió un decreto a través del cual estableció que quienes lleven mercancías para Costa Rica no entran al país, sino que colocarán el furgón en la zona aduanera primaria, lo desengancharán y un nuevo conductor lo tomará para internarlos a ese territorio. En todo esto tiene que ver la cantidad de conductores que ha dado positivo de COVID-19.